Una marea muerta, con 38 de coeficiente, aunque con un oleaje un poco subidito de tono. Nos acercamos a la Playa de Valearenas en Liencres, sobre las siete de la tarde a ver que pasaba, el airecillo un poco fresco, pero soportable, y la mar como he dicho antes, cresteando por toda la costa. Es de esos dias en los que te dices que posiblemente hoy la lies parda y saques algún buen ejemplar de relumbrón, y a eso bajamos.
La Playa esta descarnada desde el principio, falta arena por todos lados y se ha quedado sin pendiente, cada dia parece que está más tirada, lo cual es una faena ya que a la hora de comenzar la pleamar, parece que sube mucho más rápido.
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Nos situamos en mitad de la playa, y a partir de la primera lanzada ya notamos el efecto de arrastre hacia la izquierda, como nó, hacia la entrada de la ría. Con eso y todo allí nos quedamos ya que a eso hemos venido.
Tiros cortos para no enredar el sedal, y plomos de bola (recomendación de mi compañero Raúl) de 120 gramos. Cebos de todo tipo, cocos, guanaminos, titas pequeñas y muergos, esas son las carnadas que llevamos.
Chapetucos muy pequeños que no daban la talla y Chovas que presurosas se avalanzaban sobre nuestros cebos, muy poco bagaje para una estupenda noche en la que entrarón un palmerón majete y dos lubinas de poco porte. Si seguimos así, nos va a salir, bien cara la gusana americana.
Expectaculares fueron las dos tormentas eléctricas que se desplazaban al norte y a nuestro frente y que se dejaron ver durante mucho tiempo. Parece que el invierno llega ya, tarde pero como era de esperar, y el frio nos caera durante más de una de las próximas noches en las que salgamos a "DAR DE COMER A LOS PECES".
SALUDUCOS A TODOS LOS PESCADORES DESDE CANTABRIA
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